Paseamos desde Fulham hasta casi el Big Ben pasando por la triste fachada del Stamford Bridge, alguna que otra mansión y un muy recomendable paseo bordeando el río Thames por una zona que normalmente nadie pasea, desde Chelsea Harbor hasta el Vauxhall Bridge, todo eso bajo una lluvia que nos daba cuartelillo cada media hora mas o menos (lluvia que pasamos como si nada gracias a un enorme y destartalado paraguas que robe en mi puesto de trabajo al anterior inquilino de mi mesa).
Lo mejor del día fue descubrir lo mucho que nos gustaría vivir por esta zona :). Además de nuevo sentir esa sensación de que cada vez que vas a algún sitio nuevo de Londres, parece que estas en otra ciudad diferente.
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| La única vista del estadio que merece la pena... |
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